jueves, 11 de junio de 2009

México vive una situación de emergencia ante la acelerada y dramática desaparición de sus bosques y selvas. A pesar de que en las últimas cinco décadas la superficie forestal se redujo a la mitad, lo cual pone en riesgo a muchos otros recursos como la captación de agua, el gobierno mexicano permanece indiferente. La falta de políticas públicas claras y coherentes en este sector ocasionan que cada año, según estadísticas oficiales, México pierda 785 mil hectáreas de bosques y selvas. Lo anterior significa que cada minuto desaparece una superficie boscosa del tamaño de dos canchas de futbol. Según la FAO, esta es la quinta tasa de deforestación más grave del planeta, sólo superada por las de Brasil, Indonesia, Sudán y Zambia

No hay comentarios:

Publicar un comentario